Hoy debe haber sido el día más politico que he tenido quizás en mucho tiempo. Tanto asi que hablaré por primera vez de política en este lugar. No es algo de lo que me tenga que sentir orgulloso, ojalá tuviera que dejar la política a un lado de lo que me importa. Pero es imposible, tengo esa tendencia que no es ideológica ni mucho menos afiliada a algo, sino que a no comprar lo que me venden por televisión, radios o periódicos.
Asi es como llegué al tema de hoy. Me causa mucha risa y al mismo mucha pena esa gente que lo único que hace es atacar a la presidenta de una manera defensiva y juiciosa extrema de enrostrarle un sinfín de responsabilidades de las cuales los medios informan asi. Ya, convengamos en que se han cometido innumerables errores y que cada día salen a la luz públicas problemas relativos a la mala administración estatal y cosas asi. Es cierto. Son hartos, pesan al final cuando uno tiene que ir a votar en las próximas elecciones. Pero mucho más pesan cuando los medios de comunicación son manipulados en favor de la oposición del gobierno, la cual, lo único que se encarga de informar es simplemente lo malo, lo erróneo, lo equívoco y lo negativo. Qué lata es prender la tele para ver las noticias y encontrarse con esos reportajes huevones en el mega donde sale una realidad tan pobrísima y que inmediatamente se le culpa a la presidenta. Que la Bachelet, que la Bachelet. Es cierto que esa señora y esa gente no tienen idea de cómo funcionan las cosas, la misma educación que recibieron y sumado a la información que absorben día a día los han llevado a pensar eso. Cambiar a Chilevisión y ver a guille informando de algo que estoy seguro que a él no le gustaría y lo encuentra en lo personal fuera de sitio.
No estoy diciendo que no se deban informar estas cosas. pero ¿Y lo bueno? ¿Acaso no hay algo bueno que se haya hecho? ¿Por qué no se informa de vez en cuando lo bueno? Claaaaro, porque no vende. Porque no conviene. Porque la concertación ya no da para más. Bueno y si, no da para más quizás. Ayer un amigo nos contaba en el mesenjer que en el año 2006 en Chile habian 1000 sala cunas y al año siguiente el 2007 habian 2000. Utilidad que es demasiado importante para muchas mujeres esforzadas en este país, que la necesitan de sobremanera para poder trabajar. Aumentó en un cien por ciento en un año y ¿dónde salio eso?
Quizás lo que este país necesite sea un cambio de autoridades a nivel partidista. Pero, El Mercurio, La Tercera, La Segunda .... ¿Seguirán informando tan bien como hasta ahora lo han hecho? En realidad lo que este país necesite es un cambio de mentalidad más que de partidos y de gente a nivel administrativo. La gente le va a seguir creyendo a lo que dicen los medios manejados por los mismos tipos que quieren llegar al poder y después se quejan de intervención electoral. Si al fina aqui ¿Cuál es la verdadera intervención?
Están todos plenamente identificados y apuntados por el dedo maleducadamente. Las cosas caen por su propio peso. Pregúntenle al zopilote de Newton no mas.
Señora que su marido no le haga el amor todas las noches no es culpa de la Presidenta. Tampoco es culpa de la presidenta que yo esté estudiando Derecho y no literatura como siempre he querido. Abuelitos que hacen la cola en el INP, no es culpa de ustedes el sistema de pensiones que hay en este país. Tampoco es culpa de la presidenta las medias cuentas de servicios básicos que se pagan mes a mes en todos los hogares que tratan de salir adelante en este país.
Es cierto que hay demasiadas cosas que mejorar en este país y que para eso todos debemos colaborar, ya sea entregandole un voto a un candidato y siendo parte de la opinión pública, que más que pública, ha llegado a ser privada. Si hasta eso lo privatizaron estos hueones.
Es bueno que exista crítica, es la única manera en que las cosas avancen. Pero quedarnos entre crítica y crítica, buscando cortar cabezas, generando polémicas innecesarias. ¿Para qué? se trabaja por la gente para la gente y al final ¿Qué? váyanse a la chucha y arreglen la cagá de lo que dicen ser parte medios de comunicación, autoridades y empresarios. Basta de discusiones políticas absurdas y de colores políticos haciéndose mea culpa por cosas pasadas. Si ya la cagaron hace rato.
Por eso quería hablar de política hoy, porque me resulta de verdad inconcebible la idea de pensar que es tanta la gente que se deja arrastrar por lo que dicen los medios y no pueden ver un poco más allá del asunto. No quiero decir que la gente sea en la mayoría tonta aunque lo sean, están mecanizados. Mejor convengamos que de eso se trata. Si mi efusividad le causa gracia, pues bien. No saben las cosas que me gustaría decir de tener la posibilidad de un fuero parlamentario y dármelas de Patty Cofré un ratito en el congreso. Aunque me echaran, pero alguien tiene que atreverse a decir estas cosas ahora y hacer pensar a la gente hacia un cambio. no el que propugna la UDI que al final es mantener lo mismo. Lo peor es que se supone que son las nuevas generaciones las que deben llevar ese cambi, pero la mayoría anda escuchando reggaeton, poceando y haciendo cosas de jóvenes, y están en todo su derecho. Pero van a crecer y ojalá que algo en ellos los haga reaccionar, de lo contrario: GRAN PROBLEMA. Habrá seguir esperando en la entrada del circo a que empiece la matinee. Y ya me cansé, otro día sigo hablando. Chao.
Tuesday, March 25, 2008
Dia Del Joven Vagabundo
No sé y tampoco quiero saber qué fue lo que se fumó Rousseau antes de escribir el contrato social. Sé que son bonitas las comas cuando se ven estéticas redactadillas, pero cuando en la traducción del francés las sobreutilizan excesivamente, te hacen perder el sentido comprensivo de lo que lees y pedirle cornias nuevas al soberano. También sé que mi voluntad general se vuelve particular cuando es martes, porque he comenzado a querer los martes. Razón que se explica, en consecuencia, debido a sino otra cosa que, ifjkasjdasjdoje. Por lo mismo estoy de acuerdo con la monarquía cuando me deja ir al cine los martes, porque asi me siento más aristócrata y es bien sabido que la aristocracia cuando se trata de sabios y buenos sabios resulta factible hasta que se echa a perder el mouse. En el caso de desperfectos técnicos en el mouse, ya no hay más remedio que comprarse uno nuevo, pero como ya no estamos en un sistema feudal, si es que se le puede llamar sistema a dicha politica, tenemos que encargar uno a un país oriental. En el caso que las condiciones estén dadas, sólo dependerá del epicnírp y del gasto que quiera realizar. Debe pensar siempre en que por el bien del Estado en el caso de una guerra o algún peligro latente no es conveniente recurrir a gastos innecesarios. Si para eso el notebook tiene un mouse integrado. Sabiéndose claro, desde un primer momento, que la Democracia no existe. En fin.
Me encanta el cine, su precio tan económico para estudiantes, sus buenas peliculas en programación, sus asientos, su panorámica, su sonido y su infraestructura general. Por lo mismo desde ahora en adelante los martes se convierten en el día sagrado o mejor dicho el día del joven vagabundo. Compré algunos discos baratísimos para seguir poniéndole color a mi última adquisición. Si la semana pasada fue la semana de los tangos, esta semana es la de los boleros. De los bunkers, lucybell y la sonora palacios el viernes y de lo mal que lo vamos a pasar el jueves en cocholgue. Las más GRANDES obras del conocimiento.
Si encuentra que esto se ve desordenado, que no tiene lógica y que no se guia por un hilo conductor, entonces cumplio el objetivo. Felicitaciones. Por el momento sólo puedo hacer una cosa, y esa es mandarle una puteada con cariño a Jean-Jacques dondequiera que esté.
Me encanta el cine, su precio tan económico para estudiantes, sus buenas peliculas en programación, sus asientos, su panorámica, su sonido y su infraestructura general. Por lo mismo desde ahora en adelante los martes se convierten en el día sagrado o mejor dicho el día del joven vagabundo. Compré algunos discos baratísimos para seguir poniéndole color a mi última adquisición. Si la semana pasada fue la semana de los tangos, esta semana es la de los boleros. De los bunkers, lucybell y la sonora palacios el viernes y de lo mal que lo vamos a pasar el jueves en cocholgue. Las más GRANDES obras del conocimiento.
Si encuentra que esto se ve desordenado, que no tiene lógica y que no se guia por un hilo conductor, entonces cumplio el objetivo. Felicitaciones. Por el momento sólo puedo hacer una cosa, y esa es mandarle una puteada con cariño a Jean-Jacques dondequiera que esté.
Sunday, March 16, 2008
Camarón que se duerme, se lo llevan los amperes
Concepción es como una burbuja de plástico en donde cae nieve, hay una casita y un muñeco de nieve con nariz de zanahoria. Dice welcome pero en un español ilustre y municipalizado. Aunque pensándolo bien no es tan de plástico, no hay nieve ni muñecos de nieve, sólo zanahorias y son más caras que en Santiago. A veces parece un Santiago a escala o escalera, pero otras veces parece ciudad. Es bonita, tiene palomas y artistas callejeros, que son iguales, casi, iguales a los de allá. Hay cafés económicos y un cine barato para estudiantes sin muchos ingresos paternal-dependiente. Hay bares dicen, con música en vivo los jueves, y mentiras, y probablemente gente cansada que sonríe. El ritmo de vida es promedio. Ni rápido ni lento ni humilde ni soberbio. Si, indudablemente tiene cosas que riman y otras que contrastan. Como los nombres de los recorridos de las micros y la forma de conducirlas y la ciudad creciendo desentríficamente con los bosquecitos en altura muy verdes, todo respectivamente.
Lo anterior corresponde a mis primeras impresiones cuando vine a esta ciudad en febrero a buscar el lugar donde iba a vivir durante este año. En el que actualmente estoy viviendo. A la salida, sobre un bus, dejaba caer eso. Ya a dos semanas de haber llegado hay cosas que he podido confirmar por mi cuenta. Cosas que no han parado de sorprenderme y cautivarme. Ayer me compré un tocadiscos y hoy fui al estadio a ver Deportes Concepción versus Universidad de Concepción. El fútbol aquí se vive con la misma pasión pero con diferentes costumbres. Imagino que asi era a la antigua. La familia en el estadio, la viejita con el viejito, el caballero que deja a la vieja en la casa y se va con su radio a pilas (ahora su personal o emepetré si es que el nieto le enseñó y se lo regaló para navidad o el cumpleaños) . Hasta los garabatos en contra de un árbitro al tener una entonación especial adquieren un estilo propio. Es sorprendente. El verdadero león , el león de collao vencio dos a cero a los del campanil. Me reí mucho viendo como se perdian goles, tiros en el palo, gente inquieta vociferando dioses extraños y esos cánticos tan de estadio. El mundo del fútbol va más allá de los tipos que están en la cancha, se extiende a sus hinchas, a las previas, a los peloteros, a la gente que trabaja vendiendo cosas, en las alegrías que genera tamaña actividad, en esos corazones que se mueven al ver que su equipo pierde y esas manos que se alzan pidiendo un gol para la contundencia. Tengo tanto que escribir todavía del fútbol por la cresta. Mamá, Concepción es bakán.
Los primeros días eso si me sentí muy solo. Es obvio, no conocía a nadie. Bueno, no es que ahora conozca tanta gente, pero la poca que conocí me ha acogido súper bien y me ha hecho sentir alegre. Motivado. Algo que en Santiago había perdido, y que independiente de como se hayan dado las cosas y todo lo que tuve que pasar antes de estar acá desde mi pieza en la pensión un lunes de madrugada actualizando el blog, puedo decir con convicción que algo muy bueno trae.
Me gustaría caminar dos cuadras más para llegar a mi universidad. O alcanzar a escuchar dos canciones desde que abro la puerta y salgo. Tengo que arreglarle una cuestión al tocadiscos, y seré un hombre de bien y completo. Sin chucrut ni americana eso si.
Lo anterior corresponde a mis primeras impresiones cuando vine a esta ciudad en febrero a buscar el lugar donde iba a vivir durante este año. En el que actualmente estoy viviendo. A la salida, sobre un bus, dejaba caer eso. Ya a dos semanas de haber llegado hay cosas que he podido confirmar por mi cuenta. Cosas que no han parado de sorprenderme y cautivarme. Ayer me compré un tocadiscos y hoy fui al estadio a ver Deportes Concepción versus Universidad de Concepción. El fútbol aquí se vive con la misma pasión pero con diferentes costumbres. Imagino que asi era a la antigua. La familia en el estadio, la viejita con el viejito, el caballero que deja a la vieja en la casa y se va con su radio a pilas (ahora su personal o emepetré si es que el nieto le enseñó y se lo regaló para navidad o el cumpleaños) . Hasta los garabatos en contra de un árbitro al tener una entonación especial adquieren un estilo propio. Es sorprendente. El verdadero león , el león de collao vencio dos a cero a los del campanil. Me reí mucho viendo como se perdian goles, tiros en el palo, gente inquieta vociferando dioses extraños y esos cánticos tan de estadio. El mundo del fútbol va más allá de los tipos que están en la cancha, se extiende a sus hinchas, a las previas, a los peloteros, a la gente que trabaja vendiendo cosas, en las alegrías que genera tamaña actividad, en esos corazones que se mueven al ver que su equipo pierde y esas manos que se alzan pidiendo un gol para la contundencia. Tengo tanto que escribir todavía del fútbol por la cresta. Mamá, Concepción es bakán.
Los primeros días eso si me sentí muy solo. Es obvio, no conocía a nadie. Bueno, no es que ahora conozca tanta gente, pero la poca que conocí me ha acogido súper bien y me ha hecho sentir alegre. Motivado. Algo que en Santiago había perdido, y que independiente de como se hayan dado las cosas y todo lo que tuve que pasar antes de estar acá desde mi pieza en la pensión un lunes de madrugada actualizando el blog, puedo decir con convicción que algo muy bueno trae.
Me gustaría caminar dos cuadras más para llegar a mi universidad. O alcanzar a escuchar dos canciones desde que abro la puerta y salgo. Tengo que arreglarle una cuestión al tocadiscos, y seré un hombre de bien y completo. Sin chucrut ni americana eso si.
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Wednesday, March 05, 2008
Tren al sur
Los veranos son así. Nunca saben con los que nos pueden salir. Son extremadamente libres para los que no trabajan y extremadamente carcelario para los que lo hacen. Como un vaivén de pepegrillos mudos. O como una tartaleta de recuerdos avispas. Sinfines o con fines de lucro o de lujuría y ese poquito de libertinaje camuflado para curar algunas heridas sin povidona.
Como cuando un domingo en el Jumbo de San Miguel después de un fin de semana de mucha vida social y/o carretes, con dos grandes amigos estás peleando por el sabor de la casatta (lúcuma o trisabor) y para decirdirlo pides la opinión del público recorriendo pasillos hasta llegar a una elección justa. O por lo menos a una más impropia.
Las teleseries repetidas y el dilema de una noche monumental que dice Lolita o Casablanca. Todo casi como un diagnóstico de cáncer terminal a la sobremanera. Saber que somos tan inexorables y tan expirables al mismo tiempo, y que las brisas nos matan y que los domingos no siempre son tan monótonos. Dormir mucho y dormir poco, comer mucho y comer poco, ser mucho o ser muy poco. O ser.
When a man loves a playstation. Jugar hasta las siete de la mañana un miércoles de madrugada junto a otros dos grandes amigos de la vida, tomando Whisky e indudablemente, dando cuenta que eso es vida. Si, porque morir o degradarse siendo feliz también es vivir. Vas por una carretera, cantando una canción de Gardel sin notarlo y mirándola mientras duerme. Y de la nada es el día de tu santo, y hay mucha gente y estás bailando Goran Bregovic. Pasa una estrella fugaz y le pides un deseo ingenuamente. Te sientes patético y contento, entonces duermes. Luego despiertas y eres libre, te estiras y apareces sentado en un bus leyendo Grass.
Si, leyendo pasto. Porque te encanta leer el pasto también. Los audifonos captan como te estás sintiendo y te transportan mediante ese sonido. Caminas y caminas, te duelen los pies y las manos y los ojos y el corazón un poquito. Sabes que debes dejar de comer cosas con tanto colesterol. El asunto es que eres ser humano y te comportas como tal. Y te enamoras, desenamoras, ilusionas, armas de paciencia. Porque debe ser la mejor ciencia, aún cuando de científico tengas sólo tu reloj biológico. Haces el amor por cortesía, y eres de las personas que para llegar a la paz absoluta necesariamente tienen que atravesar una guerra. Te encantan los detalles de los detalles, los dibujos de los boletos de micro, los nombres de los recorridos que siguen recoriéndose, buscar apellidos chistosos en los créditos, ver películas malas o aburridas sólo porque tienen bonita fotografía.
Es catorce del segundo mes del año. Mucha gente usa la excusa para amarse o quererse, sentirse extremadamente sola y hasta para ir al supermercado haciendo cuenta que el día es uno más de los trescientos sesenta y seis días que tiene el siglo. Vas con ella caminando de la mano por los cerros de Valparaíso, la miras sabiendo que tienes los días contados y que el presente subexiste en el futuro más próximo. Como le digo que la quiero sin que se de cuenta y al mismo tiempo siendo espontáneo, es lo que jamás llegas a pensar. El pragmatismo de no querer saber que hacer en momentos decisivos te ha llevado las ideas a otro mundo. Disfrutas tanto ese atardecer, y la huevada parace cerro alegre con la excepción que ella jamás será Beatriz Thompson y es más simpática que la Merino y tu nunca serás Mauricio Méndez y tan quebrado como Zabaleta. Y llegas al punto cúlmine, al éxtasis, al orgasmo, al clímax de lo que irradian los veranos de la vida. Con mucha personalidad y trabajo en equipo, ganamos un karaoke un decimocuarto de febrero. Ser melómano tiene sus beneficios después de todo, piensas al salir de aquel local. Y si. Despertar abrazado a una mujer por la mañana es algo del otro mundo. Del mismo donde se fueron esas ideas.
Los veranos son así. Siempre saben lo que quieren dejar salir.
Eres realista. Es mejor que sea asi. La cordura es un estado mental de la locura cotidiana. Poco a poco te empieza a importar menos lo que piense la gente de ti, parece que estás madurando. O quizás sólo tu ego y tu autoestima han aumentado de un tiempo a esta parte, gracias a ella, gracias a todo lo que tuviste que pasar para llegar hasta este lugar.
Y le dices adiós a la estación, a la que fue tu estación alguna vez. Subes al tren, y agitas la mano despidiéndote de tantas palabras importantes y con la incertidumbre de no saber si algún día regresarás aunque en el fondo de ti estás seguro de aquello. Te sientas en el cuarenta y ocho, salón, ventana y lloras con mucha pena. Porque es tanto lo que dejas atrás de esos rieles, y es tanto lo que tuviste que pasar para llegar a donde te llevo el destino, la vida, tu dios y tu poesía, que sabes que siempre hay una nueva oportunidad de emprender algo nuevo y crecer aunque sean cinco centímetros de espíritu.
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